El Día Mundial del Turismo 2025 pone el foco sobre el potencial transformador del turismo como agente de cambio positivo. Sin embargo, el aprovechamiento cabal de este potencial exige algo más que un simple crecimiento. Una buena gobernanza, una planificación estratégica, un seguimiento riguroso y el establecimiento de prioridades claras que se ajusten a los objetivos de sostenibilidad a largo plazo son también elementos imprescindibles
El turismo es más que un sector económico, es un acelerador del progreso social, que favorece la educación, genera empleo y crea nuevas oportunidades para todos:
La materialización de esos beneficios hace imprescindible la adopción de un enfoque bien planificado e inclusivo, que sitúe la sostenibilidad, la resiliencia y la equidad social en el centro del desarrollo turístico y la toma de decisiones.
La transformación del turismo sostenible debe comenzar con una gobernanza eficaz y una planificación centrada en las personas. Es fundamental invertir en educación y capacitación, en particular para los jóvenes, las mujeres y las comunidades en riesgo de exclusión.
A pesar de las oportunidades de crecimiento inherentes al turismo, casi la mitad de los jóvenes de los destinos emergentes carecen de la formación adecuada que les permita su plena participación:
La superación de esa brecha requiere que los gobiernos y las partes interesadas confieran prioridad a la creación de programas educativos y de formación profesional, accesibles y de alta calidad, que se adapten a la evolución de las necesidades del sector turístico y doten a las personas de la capacidad pertinente para destacar y potenciar con vigor el progreso colectivo.
El turismo también se ha de impulsar mediante la innovación estratégica y el emprendimiento responsable.:
La digitalización y los modelos de negocio innovadores brindan oportunidades ingentes. Por ende, el apoyo a las micro, pequeñas y medianas empresas y a las empresas emergentes, sobre todo a las dirigidas por mujeres y jóvenes, puede representar una contribución significativa a la prosperidad inclusiva y a la diversificación económica duradera.
Por otro lado, las inversiones sostenibles también son una poderosa herramienta para la transformación:
Entre 2019 y 2024, el sector atrajo más de 2300 proyectos de inversión extranjera directa en nuevos proyectos, lo que representa 126 000 millones de dólaresestadounidenses. No obstante, se han de priorizar las inversiones que aporten beneficios a largo plazo para la comunidad, fomenten la resiliencia y favorezcan la acción climática. Es preferible que estas inversiones sean más inteligentes y sostenibles. Por consiguiente, conviene que los actores públicos y privados colaboren para alinear el crecimiento con los objetivos climáticos, las repercusiones sociales y la innovación, de conformidad con las directrices que figuran en los Principios Rectores para una Inversión Sostenible en el Turismo.
La gestión responsable de los recursos naturales es otro elemento fundamental:
Las partes interesadas del sector turístico deben anticiparse a sus efectos y velar por la reducción significativa de las emisiones, la conservación de la biodiversidad y la inversión en infraestructuras resilientes, con miras a salvaguardar nuestros recursos naturales y ecosistemas y garantizar la disponibilidad de los recursos para las generaciones futuras.
Lamamiento Cistlino y Apremiante:
Este Día Mundial del Turismo es un llamamiento cristalino a la par que apremiante: es urgente comprometerse a hacer del turismo una plataforma que favorezca una transformación sistémica y sostenible, guiada por una gobernanza eficaz, una planificación estratégica, un seguimiento riguroso y unas prioridades colectivas evidentes.
Los Podres del Turismo:
El turismo encierra el poder no sólo de fomentar la paz, sino también de impulsar el empoderamiento, la regeneración y la transformación sostenibles en nuestro mundo.
Es hora de actuar.
Aprovechemos el pleno potencial del turismo para la construcción de un futuro más sostenible, inclusivo y resiliente para todos.
Esta edición del Día Mundial del Turismo tiene como sede Malaca, Malasia.
Breve Comentario Editorial:
En Sinaloa y Mazatlán es urgente que se adopten medidas correctivas en materia de turismo, en donde persiste la idea que “el Progreso no se debe de detener” es decir, que veladamente quienes fomentan esa idea, mienten rotundamente, dado que tal como lo indica el lema del Día Mundial del Turismo: Turismo y Transformación Sostenible. Es un llamado pues a desterrar las brutales, depredadoras y además obsoletas prácticas que hasta el momento venimos practicando en esta entidad. En manos de todos está transformas sosteniblemente a Mazatlán y Sinaloa, desde el habitante de las colonias populares, las más modestas y alejadas comunidades, así como las ciudades, pasando por autoridades y con dedicación especial a los inversionistas… Ahí se los dejamos de tarea.





