Pelicacho Alegre: una muestra viviente del desamparo que priva en las especies marinas y terrestres que habitan en Mazatlán y a las autoridades poco les importa la situación

  • En Mazatlán, al desorden que priva en materia de invasión de espacios públicos por parte de vendedores ambulantes y empresarios que han venido arruinando imparablemente el paisajismo, la brutal operación de palapas en playas que son santuarios naturales, el desparpajo en materia de regulación del crecimiento urbano, entre muchos agravios más, debemos sumarle el abandono que las autoridades federales han sumido a la fauna silvestre y marina


El Primitivismo Turístico que Priva en Mazatlán es la causa de que no avancemos, ni escalemos a los primeros planos de esta noble actividad

Mazatlán, Zona Trópico, Sinaloa, México, a; 2 de agosto de 2023.- En Mazatlán, al que las autoridades y los propios mazatlecos presumen como la joya de la corona turística de Sinaloa, que lo es, pero lamentablemente tenemos que consignar que pese a ello, es decir, pese a ser el más grande destino turístico del estado, aún con ello, sigue privando el primitivismo en materia turística.

Aquí, la destrucción de la naturaleza es brutal, la invasión de espacios públicos por parte de vendedores ambulantes y empresarios es sencillamente incomprensible. La criminal invasión de Palapas que operan como restaurantes en las mejores playas de Mazatlán es, por decir lo menos, una afrenta turística y a la sustentabilidad, la contaminación visual es ridícula, el desparpajo en materia de regulación del crecimiento urbano es increíble y si le seguimos sumando cosas y casos la lista de horrores se tornaría inacabable.

Por ello, en esta ocasión nos avocaremos a uno solo de los miles de desordenes que privan en Mazatlán, mismo que deja muy en claro el primitivismo turístico que prevalece localmente, el cual queda exhibido brutalmente y a flor de piel en materia de protección a la fauna silvestre, marina y terrestre, y es que con la desaparición de Acuario Mazatlán, esa noble y nunca bien ponderada institución paramunicipal que durante su funcionamiento se caracterizó por operar varios programas de protección de las especies marinas y terrestres y, sin estar dentro de su marco de operaciones normadas, se echó a cuestas la tarea de proteger, curar, cuidar y devolver a su hábitat a muchas especies marinas y terrestres.

 Pero como todo en Mazatlán, erróneas visiones y opciones de operatividad, así como de adaptación en la vanguardia turística, ahorcaron a la institución y, con ello, dejaron en el desamparo a las especies marinas y terrestres que cohabitan con los mazatlecos. Así tenemos que en la actualidad, en Mazatlán no hay autoridad que se haga responsable de estas especies cuando por la razón que sea resultan heridas o maltratadas, y aunque sabemos que es responsabilidad de las federales, no obstante es casi una obligación de las municipales que tomen cartas en el asunto, ya que estas son las primeras responsables de que aquí se proteja a las especies, el medio ambiente y a toda la naturaleza, de igual forma las estatales deben de sentirse obligadas a lo mismo que las municipales.

Pero hasta ahora, a ninguna autoridad le interesa lo que en esta materia suceda, al igual que como a las que señalamos en la lista del horror, y por ello, brilla en todo su esplendor el primitivismo turístico en Mazatlán, o si estamos equivocados entonces cómo es posible que suceda lo que a continuación les expondremos:

Hace días publicamos una nota que fue motivada por decenas de comentarios que nos hicieron llegar mazatlecos, miembros de la comunidad extranjera radicados en Mazatlán y, de manera increíble, turistas, quienes con preocupación nos expusieron diferentes casos de especies marinas y terrestres heridas y no encontraban lugar alguno que se hiciera responsables de ellas.

Una vez que publicamos lo anterior, pues si, nos llamaron algunos funcionarios, pero lejos de darnos una solución, nos llenaron de pretextos, el caso es que nada se hizo al respecto.

Pero, hoy, no tocó vivir la experiencia en carne propia, es decir, nos topamos con un Pelícano Herido, al cual bautizamos como “Pelicacho Alegre”, ya que nos lo encontramos a las afueras del Restaurante de Mariscos El Muchacho Alegre de Playa Camarón o Zona Dorada.

Cuando lo vimos ahí, en la banqueta del restaurante, de momento no notamos que algo le pasara. No fue sino hasta que una joven colaboradora del lugar se aceró a Pelicacho Alegre para darle de comer que notamos las grandes dificultades que este tenía para caminar, ya que una de sus alas estaba muy lastimada.

La misma joven nos dijo que una compañera de ella lo había rescatado y que ya tenía días en ese estado, pero que todo mundo se ocupaba de darle de comer y cuidarlo ya que no había lugar alguno para llevarlo a curar.

Es de esta manera que hicimos un en vivo en el lugar y a raíz del mismo nos llovieron las quejas, comentarios y sugerencias, la verdad la mayoría con buenas intenciones, pero ninguna que nos llevara a encontrar los cuidados y recuperación de Pelicacho Alegre. Incluso una nos llamó la atención, ya que se nos dijo que los pelícanos cuando ya eran mayores, por su propia edad sus alas se volvían muy susceptibles de quebraduras y lastimaduras, y que en esos casos lo mejor era dejarlos en paz y que murieran en sana paz.

Pero esa teoría se vino abajo cuando conocimos a la joven colaboradora de El muchacho Alegre Zoé Montero y ella nos platicó la verdadera historia de Pelicacho Alegra misma que les damos a conocer en el vídeo que se encuentra en la parte superior del presente:

Una vez que lo vea, o si ya lo vio, nos encantarla saber su opinión al respecto…

Visitas: 60

Share.
Leave A Reply

¡Reservar Excursión!
Exit mobile version