De nueva cuenta en Mazatlán resurge la ley de mis pistolas y los taxistas rojos bloquean a Atamsa en plena ave. Rafael Buelna
- Decenas de policías logran controlar la virulenta acción que ocasionó la detención de algunos rijosos y de unidades
Mazatlán, Zona Trópico, Sinaloa, México, a; 25 de Marzo de 2019.- Este nuestro querido Mazatlán, la joya de la corona del turismo en Sinaloa y, a decir de las autoridades, uno de los destinos turísticos más importantes de México, el cual gracias a la carretera Mazatlán-Matamoros ha tenido un auge turístico, inmobiliario, de negocios y portuario, sin precedentes.
Una: en no entender que Mazatlán y sus actividades económicas no son cotos de grupos, empresas o particulares.
Dos: que nadie y bajo ninguna circunstancia puede actuar por encima de la ley, en tal sentido: nadie tampoco, bajo ninguna circunstancia, puede imponer reglas a su libre albedrío y conveniencia.
Todo lo anterior viene a tema porque esta mañana, se dio un capítulo más de la ya crónica discrepancia entre prestadores del servicio público de pasajeros de Mazatlán.
En verdad que Mazatlán, no es lo que aparenta, al menos no lo que se pregona en las reuniones entre autoridades y sectores, en las que se presume que en Mazatlán se trabaja para dar lo mejor de los mazatlecos a sus visitantes.
Lo que sí es; un verdadero chiquero colonial y, por ende , caciquil, en el que cada grupo quiere hacer lo que le dé su rechingada gana y sacar el mayor provecho del turismo a cambio de muy poco y, en muchos casos, de nada.
Mazatlán también es; la mejor universidad de México, para enseñar cómo pegarle en su madre a un destino turístico, en donde se ofrecen cátedras y doctorados de: Pésima promoción, Contaminación auditiva y visual, abuso mercantil, destruir los paisajes, invadir espacios públicos con comercio ambulante, bloqueos de turistas que usan determinado servicio de pasajeros y una larga lista más de atrocidades.
Aparte somos especialistas en: quejarnos de las personas que nos favorecen con su visita, a quienes encasillamos como turistas de bajo nivel adquisitivo. Y que esperábamos con la bola de tropelías que minuto a minuto cometemos en contra de nuestros visitantes: vendedores fraudulentos, Opicis agresivos, taxistas, pulmoneros, aurígeros abusivos, y una larga fila de malos prestadores de servicios.
Y para muestra: la que nos dieron hoy los taxistas rojos que de nueva cuenta bloquearon una unidad de Atamsa y se armó el desmadre, ya que al ser reportado el incidente a las autoridades estas llegaron por decenas y al querer impedir el delito, pues se armó el jaloneo terminando con algunos detenidos y la confiscación de unidades de los taxis rojos. Eso sí, todo bajo el argumento “Es que estamos protegiendo nuestra fuente de trabajo” de los taxistas rojos.
O sea, que se chinguen los turistas, que se vaya a la goma la imagen de Mazatlán, que se pudran los trabajadores de hoteles, restaurantes, agencias de viajes y demás operadores turísticos que suman miles.
Sí, que chingue su madre todo: Primero mis huevos y luego los de los demás. Mandan decir los taxistas públicamente.
Lo bueno de esta historia es que se detuvieron a algunos taxistas y unidades, que desde luego, más tardaron en detenerlos que en salir libres, ya que el cargo no es así que digamos grave, “obstruir las vías de comunicación”.
Pero en el país de los ciegos, el tuerto es el rey, así que con este mejoralito al parecer se da inicio a una verdadera acción de parte de las autoridades para solucionar este grave problema, y que no tiene que buscarse mucho, ni hacerse leyes para ello: aplicar la ley y no permitir impunidad para nadie. Eso es todo.
Vamos a ver que resulta en este nuevo episodio de la cátedra: “Cómo destruir un destino turístico en dos patadas y varios bloqueos de taxistas”.
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