Ecos de la Visita de AMLO a Sinaloa: CIP Playa Espíritu

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Visitan AMLO y Quirino el Centro Integralmente Planeado “Playa Espíritu”

• Recorren este complejo turístico del sur de Sinaloa

• Propone el ejecutivo federal dos alternativas para el complejo turístico: una reconvertirlo y otra venderlo

Comentario Editorial:

Con la colaboración de: Rubén Romero Ibarra

Bien para el CIP Playa Espíritu la visita del presidente de la república mexicana, Andrés Manuel López Obrador, y es que mucho se había venido especulando sobre este complejo turístico que tantas expectativas causó, primero cuando se anunció y, después, cuando se concretó la compra del terreno e iniciaron los trabajos de construcción.

Los más entusiasmados, nos consta, fueron los escuinapenses, ya que consideraban que por fin, con esta magna obra, les había llegado la hora de iniciar su tan anhelado despegue turístico.

Pero hagamos un poco de historia:

La Era Calderón del CIP Playa Espíritu:

Y no las faltaba razón a los escuinapenses al sentirse entusiasmados y para estar emocionados, ya que de manera paralela al proyecto se desató una verdadera espiral inmobiliaria, ya que diversas compañías empezaron a comprar tierras en las áreas más cercanas al proyecto, otras en la ciudad de Escuinapa compraron bienes inmuebles y unos más trasladaron sucursales de grandes empresas, eran los tiempos del presidente Calderón. La expectativa se mantuvo alta durante su sexenio pero conforme este llegaba a su fin las cosas ya no eran tan emotivas para el Playa Espíritu.

Y es que se veía ya muy poco probable que el partido al que pertenecía Calderón conservara la presidencia y, como es tradicional en la política mexicana, quien quiera que ganara entre Peña Nieto o López Obrador, se estimaba que el proyecto peligraba.

Tampoco faltaba razón a quienes pensaban así, más que conocido es el tradicional derroche y botadura de proyectos entre un sexenio y otro.

La era Peña Nieto en el CIP Playa Espíritu:

Al ganar Peña Nieto, las cosas no fueron muy que digamos halagadoras para el Playa Espíritu, si bien tenemos que reconocer que se le siguió invirtiendo, pero no en la magnitud y relevancia que el proyecto requería, muchos creemos que solamente se le dio mantenimiento, se avanzó, poco, pero se avanzó.

Y es que al igual que lo que sucedió con Calderón que se previó con tiempo que no conservaría su partido la presidencia, lo mismo sucedió con Peña Nieto, pero en partida doble, es decir, ni el partido de Peña Nieto, ni el que fuera de Calderón tenían posibilidad alguna de llegar a la presidencia ante un López Obrador que desde tiempo atrás se veía como prácticamente imposible que no ganara la presidencia de México.

Ante ello, las especulaciones sobre el CIP Playa Espíritu fueron más severas que cuando llegó Peña Nieto, y todo ello mermó en el ánimo de los escuinapenses que veían que su anhelado sueño turístico se esfumaba.

Desde luego que un proyecto así no es para desecharse así como así, ya que no solamente afectaría la gran inversión ya hecha en el mismo, sino, y lo más importante, destrozaría las expectativas no solamente de los escuinapenses, sino que de toda la región sur de Sinaloa y Norte de Nayarit.

Ante todo esto, de manera correcta, grupos sociales y empresariales empezaron a hacer sinergia para elaborar una buena propuesta para que López Obrador no fuera a dar el clásico plumazo mortal al CIP Playa Espíritu.

La Era AMLO en el CIP Playa Espíritu:

Y es así que el ahora presidente de la república llega directamente al complejo, lo cual no quiere decir que previamente no haya estado ya enterado de lo que este representa, desde luego que sí. Aunque por lo que dijo, intuimos que no está enterado del todo o en el menor de los casos, bien enterado.

Veamos lo que dijo al respecto Andrés Manuel López Obrador:

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Y más tarde vamos a ir allá, a un terreno que adquirieron para un desarrollo turístico. Está aquí conmigo Rogelio Jiménez Pons, que es de Fonatur, director de Fonatur; el secretario de Turismo, Miguel Torruco, que me acompaña.

Es un terreno que se compró en un gobierno y como dos mil 500 hectáreas para un desarrollo turístico, pagaron como 120, 150 millones de dólares y ahí está.

Entonces, vamos a ver qué hacemos con ese terreno, porque son bienes del pueblo, es dinero de los mexicanos que queremos darle uso en beneficio de Sinaloa.

Ese desarrollo, todo lo que se obtenga de acuerdo a lo que se decida, va a ser para beneficio de Sinaloa. Les van a quedar aquí esos recursos en Sinaloa.

Nada más vamos a ver qué es lo que conviene más, si terminarlo con una promoción del gobierno, con la iniciativa privada, o subastarlo, es decir: ‘A ver, costó tanto’, necesitamos dinero para las presas y para otras actividades; damos las facilidades para el desarrollo turístico, a ver si hay empresas que quieran invertir y lo podríamos hacer de esa manera.

Eso es venderlo o desarrollarlo. Venderlo sin que se pierda, es decir, que cuando menos saquemos lo que se ha invertido, porque es dinero de todo el pueblo. A eso venimos también.

Y nos vamos a seguir encontrando. A lo mejor no aquí, en El Rosario, ahora sí voy a ir a Escuinapa, al pueblo, porque ahora vamos, pero vamos a ver el terreno, porque quiero irlo a ver, y después a lo mejor en Concordia y siempre ya Mazatlán les puedo decir que voy a estar, en 15 días más voy a estar en Mazatlán, y ahí vamos a hablar también del desarrollo.

Y vamos a estar permanentemente viéndonos porque no va a haber divorcio entre pueblo y gobierno. Es gobierno del pueblo para el pueblo y con el pueblo.

Hasta aquí lo que dijo el Presidente López Obrador

Pero de manera también correcta, creemos que el mandatario federal no se deja llevar por los papeles y los decires, no, decide ir, ver, escuchar y palpar pues que tan cierto es lo que le dicen o aconsejan,

Aunque el primer mandatario de México en su visita al CIP, se notó interesado en todo lo que se le decía y argumentaba, por supuesto que a lo largo de la misma sopesó la información que ya tenía contra la que encontró y le argumentaron.

Basados en toda esta documentación consideramos que López Obrador, en El Rosario, Pueblo Mágico, ya había dejado en claro que tenía cierta información del CIP, a nuestro juicio, no muy buena, consideramos inclusive que hasta tendenciosa. Por ello soltó las dos dos propuestas:

1. Continuar con el proyecto, pero reconvirtiéndolo y haciéndolo más amigable con el medio ambiente y las comunidades, así como con la región.
2. De plano, venderlo, más no al clásico estilo mexicano neoliberal: “Lo hacemos aparecer inviable para que parezca un desecho, y lo vendemos a precio de risa a los amigotes”. Por ello dijo el presidente López Obrador: “O lo vendemos pero a un buen precio”.

Nosotros, somos definitivamente partidarios de la opción “A”, sin duda la mejor, ya que venderlo significaría más de lo mismo en turismo. Es decir, los grandes capitales se harían de excelentes terrenos para el desarrollo turístico y, lo mejor para ellos, ya con caballo ensillado, acompañado todo ello de una increíble debacle competitiva, especulativa, financiera, ambientalista y social, y no es que estemos denostando a los inversionistas, para nada, Pero su historia está marcada por todo lo antes señalado.

Y en la actualidad la actividad turística, como tal, está reventando en todos los aspectos referidos, aunque los inversionistas han acudido a cuestiones asintesialistas para disfrazar lo inocultable, que es el salvajismo mercantil, en ese sentido acuden a cuestiones ambientalistas, entre otras, pero en realidad como el lobo del cuento de la caperucita roja.

En tal virtud, desde este espacio y con todo respeto le decimos al sr. Presidente de la República Mexicana, Andrés Manuel López Obrador: que la opción “A”, es decir, la de buscar la forma de darle a este complejo un verdadero sentido de empatía, no solamente con la naturaleza, sino con la población de toda la región, en otras palabras, el sentido colaborativo entre los habitantes de cada región y no el especulativa tal como es ahora y como se pretende en la opción “B”. Porque no todo se resuelve con vender y el que sigue que arrempuje. No, la opción “B” es más de lo mismo, y lo que toda esta región ocupa es un atractivo integralmente planeado que se convierta en “Ancla”, en detonador de toda la región y no de grupos de personas.

Más aún sr. Presidente y, si no lo sabía o no se lo han dicho: Escuinapa municipio, por principio, se ubica en la Zona Trópico, eso ya por en sí es un valor diferencial insuperable, en segundo, en sus zonas de playa y manglares se configuran verdaderos paraísos naturales, en los que no caben los desórdenes asociados a la forma salvaje mercantilista, y pudiera señalarle otros valores más, pero creo que con los dos anteriores es más que suficiente como para cuando menos nos haga el favor de poner a su equipo de trabajo a reevaluar todo en cuanto al CIP Playa Espíritu, que por cierto, para nada va ese nombre con la realidad de este paraíso terrenal de México.

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Ahora veamos el informe oficial de lo que ahí sucedió

Teacapán, Zona Trópico, Escuinapa, Sinaloa, México, a; 26 de enero de 2019.- El presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador y el gobernador del estado, Quirino Ordaz Coppel, realizaron un recorrido por el Centro Integralmente Planeado “Playa Espíritu”, donde de manera ejecutiva se les expuso el estatus de la obra, así como el potencial que tiene esta región del sur de Sinaloa.

A través de una exposición gráfica y una visita guiada en la “Casa Playa”, el presidente Andrés Manuel López Obrador conoció más a fondo este ambicioso proyecto que vendría a detonar la economía del sur de Sinaloa y el norte de Nayarit.

Este complejo turístico ubicado en el municipio de Escuinapa tiene una superficie de 2 mil 381 hectáreas y desde el año 2008 a la fecha se han invertido mil 403 millones de pesos en diversas obras de infraestructura, destacando 2014 como el año que recibió una mayor inversión, informó el delegado de Fonatur en Sinaloa, Eduardo Bazúa Hernández.

Precisó que existe un polígono prioritario de 713 hectáreas, donde se han realizado diversas obras, como la instalación del servicio de agua potable, telefonía, alumbrado público, 40 kilómetros de vialidades. Además, un malecón de 1.8 kilómetros de longitud, con drenaje pluvial, red de riego y 114 palmeras.

Correspondió a investigadores de la Universidad Autónoma de México, realizar una explicación sobre la conservación de la flora y la fauna del lugar, el cual tiene como objetivo proteger y monitorear diversas especies como el jaguar y las tortugas marinas. Asimismo, se informó que existen en esta región (detectadas) 214 tipos de aves, 22 mamíferos, 33 reptiles, 10 anfibios.

Previamente, el presidente Andrés Manuel López Obrador y el gobernador Quirino Ordaz hicieron una breve visita al Hotel Express, el cual cuenta con un total de 53 habitaciones (33 cuartos sencillos, 13 cuartos dobles, cuatro suites y una para capacidades especiales), quienes pudieron constatar el gran potencial que tiene esta zona.

Durante esta visita estuvieron presentes también, el delegado de Programas Integrales de Desarrollo del Gobierno de la República, José Jaime Montes Salas; los alcaldes de Escuinapa y Mazatlán, Emmett Soto Grave y Guillermo Benítez Torres, respectivamente.