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En esta magnífica imagen de 1950 del Mercado municipal Pino Suárez de Mazatlán, captada por la lente y aguda visión del excelente fotógrafo Pérez, nótese los graves estragos que ya el comercio desordenado le venía haciendo a este invaluable lugar, incluso, la publicidad en la parte superior nos muestra que era más importante que el inmueble en si. Al igual que ahora en 2018, 68 años después, que pena….
- Bien deberíamos saber; autoridades, locatarios y mazatlecos en general, que no todo son obras, ni remodelaciones en este icónico lugar, creemos firmemente que las verdaderas soluciones a sus distintas problemáticas radican en que las partes involucradas tomen conciencia, primero del valor que tiene esta joya arquitectónica y, en segundo, derivado de esa toma de conciencia se reordene todo el comercio, en particular el aberrante del exterior. De no ser así, seguiremos en la misma tónica de décadas y décadas atrás y no saldremos de lo mismo, un mercado que da pena
Pero, un maleficio parece que se ha empoderado al interior del mismo, dado que históricamente son los propios locatarios los que generalmente siempre están en desacuerdo, vean si no:
-El 5 de mayo de 1899 el Gobernador del Estado de Sinaloa, Don Francisco Cañedo asistió a la inauguración del entonces llamado Mercado Manuel Romero Rubio, pero desacuerdos entre los locatarios que ocuparían el inmueble impidieron que se abrieran las puertas y no fue sino hasta un año después, el 5 de mayo de 1900, cuando los mazatlecos por fin tuvieron su mercado”.
Como pudieron observar, desde las entrañas propias del mercado surgen las fuerzas que generan siempre conflictos, mismos que en muchas ocasiones, si no es que en todas, son azuzados por las autoridades en turno. Esta maléfica combinación, de locatarios encontrados entre si y de autoridades azuzadoras ha generado conflictos múltiples que siempre han desembocado en el deterioro de la imagen, funcionalidad, competitividad y desaprovechamiento eficiente del gran potencial de este también atractivo turístico.
Los mercados municipales, como el nuestro, son, en esencia, una ventana que muestra nuestro carácter, nuestro modo de vida, nuestro entorno, en fin, reflejan pues y de una manera hasta cierto punto nítida, qué y cómo somos.
Por ello, en algunos lugares de México y del mundo, estos sitios, considerados como entes vivos, han evolucionado en muchos sentidos, unos se han especializado en lo gastronómico, otros en el comercio, unos más en arte y la suma de los dos anteriores, es decir, evolucionan de acuerdo al carácter de la propia ciudad en que están asentados y al del de sus habitantes.
Con pena tenemos que decir, que el nuestro, hasta ahora no lo ha hecho. Y no se vayan a confundir, una cosa son los rescates, remodelaciones y adecuaciones a que es sometido el Pino Suárez de cuando en cuando, y otra muy distinta el que evolucione a una entidad viva y reflejo de Mazatlán. Existe un abismo de diferencia en ello y, hasta el momento, también nos separa un abismo entre lo que somos y lo que deberíamos ser en el Pino Suárez.
Hay un dicho popular que dice: “De acuerdo al nido, es el pájaro”. Y si aplicamos este dicho a como luce le Pino Suárez, al menos en su comercio exterior. Seguramente muchos no querrán o querremos, ser pájaros mazatlecos.
Bueno, ahí dejamos nuestro comentario editorial, para dar paso a la nota que generó el municipio de Mazatlán con respecto al Pino Suárez…
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Supervisa el Alcalde de Mazatlán las obras de remodelación y adecuación a que está sujeto este nunca bien ponderado sitio y al mismo tiempo pide acelerarlas
Locatarios se dicen agradecidos de las obras que se realizan dentro del inmueble y en la calle Aquiles Serdán
“El compromiso que hacemos delante de ustedes (medios de comunicación) y con el presidente de los locarios (Alejandro Bernal) es para que den fe de lo que se está haciendo, en qué tiempo vamos a terminar, qué nos hace falta, en qué podemos coadyuvar, el Municipio de Mazatlán, para que esto quede terminado a la brevedad”, declaró el alcalde mazatleco tras un recorrido que realizó ayer por la mañana.
Bouciéguez Lizárraga habló con el Secretario de Obras Públicas del Estado, Osbaldo López Angulo, quien aseguró que las obras de mejoramiento en el área de comidas, que será llamada “zona gourmet”, será terminada en un mes.
Aseguró que el funcionario estatal le comentó que a la brevedad fluirán los recursos para que la obra sea más ágil, aunque, aclaro, que esta nunca se ha detenido del todo, pero precisó que si se puso más lenta.
Alejandro Bernal, líder de los Locatarios del Mercado Pino Suárez, explicó que el proyecto consiste en la reposición del cableado en todo el inmueble, la techumbre y la rehabilitación de las redes de agua y drenaje.
También, uniformar los puestos exteriores, hacerlos un poco más pequeños y funcionales y quitar las lonas frontales para mejorar el aspecto de la fachada.
En la parte de los restaurantes, se están colocando tragaluces en el piso para que brinden mayor iluminación a la planta baja y se están ampliando los pasillos sin quitarle espacio a los locales; asimismo, se están mejorando las escaleras.
Joel García Regalado, director de Obras Públicas Municipales, indicó que el avance de los trabajos es de 40 por ciento en dos meses de obra.
“Los problemas del contratista son administrativos, de dotación de recursos, es una obra que viene de Culiacán, por eso se va a ver con el Secretario de Desarrollo Económico y de Obras Públicas porque hay un contrato de por medio, vamos a coadyuvarles para que se cumpla con los plazos”, expresó García Regalado.
Indicó que faltan básicamente acabados en pisos y paredes.
Durante el recorrido, Alejandro Ontiveros Arámburo, quien tiene un local de dulcería, dijo estar satisfecho con las obras que se realizan; Raúl Mora Magaña habló de los 6 depósitos de basura que los propios locatarios donaron.
En el área de comida de la planta alta, los locatarios pidieron acelerar los trabajos, aunque comentaron que no han dejado de trabajar salvo los días que el contratista se los pide por su propia seguridad.
Así van las cosas en el Mercado Pino Suárez de Mazatlán
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