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En el marco del 486 aniversario de la fundación del pueblo más antiguo del occidente de México, Fernando Barraza con el entusiasmo que lo caracteriza, el apoyo de la Crónica de Sinaloa y de Creativos7 Editorial presentó su libro
Sorprende la respuesta positiva de los chametlenses
Por: Rubén Romero Ibarra
Introducción
En este 2017, nos motivó asistir a estas festividades la presentación del libro: “Chametla y Yo” de la autoría de un gran amigo, artista, creador, e incansable buscador y formador de talentos, Fernando Barraza, quien, contra todas las limitaciones que existen en México y más aún en Sinaloa para quienes se atreven a tratar de plasmar en un libro sus vivencias o conocimientos, logró, con el apoyo de la Crónica de Sinaloa y de la Editorial sinaloense Creativos7, publicar su obra en la que da a conocer personajes y cuentos.
Fue precisamente por su calidad como ser humano que decidimos, desde hace tiempo, seguir de cerca los pasos de Fernando Barraza, de tratar de apoyarlo en lograr alcanzar sus objetivos. Reconocemos que no es gran cosa la que hemos hecho en su favor y, aún así, él sigue confiando en nosotros, demostrándonos su don de gente y amistad.
Dejemos pues que nuestro reportero, Rubén Romero Ibarra les relate todo lo sucedido en nuestro viaje a Chametla…
Un poco de Historia sobre Chametla
Este Señorío estaba habitado por lugareños cuyo dominio era notable en el arte de la pesca, la caza y la alfarería, los Totorames convivían armónicamente con otras tribus serranas como los Acaxees, Pacaxees y Xiximes, que según los antecedentes históricos eran magníficos guerreros, pero con menos avance cultural por sus costumbres nómadas y antropófagas.
Sin embargo, esta armonía fue interrumpida por la llegada de los españoles, en su mayoría ex presidiarios que fueron enviados por La Corona Española a probar suerte y con el fin de colaborar a la conquista en un nuevo territorio habitado por tribus “salvajes”: pero… ¿quiénes eran los salvajes?.
De cualquier forma, tal empresa fue ejecutada por El Capitán General Nuño Beltrán de Guzmán entre el 19 y 21 de enero de 1531, este personaje al servicio de La Corona Española fue catalogado por los mismos militares y misioneros españoles, como el más sanguinario de los conquistadores, mismo que en sus actos avasalladores redujo la población de estas etnias a casi nada, por tal razón el mestizaje en esta zona no fue tan marcado como en otras partes del país, a esto obedece que en estas tierras, como en otras de más al norte de Sinaloa encontramos gente con rasgos autóctonos-europeos y, en otras, de plano el mestizaje no fue posible porque eran comunidades solo de españoles y otras mezclas europeas, de tal suerte que sólo se dio el mestizaje cultural pero no el sanguíneo.
Pero haciendo un poco de lado la historia de Chametla, veamos como festeja este pueblo en la actualidad su 486 aniversario de su conquista, fundación o mestizaje.
La Fiesta de los Chiametlecos
Muy de mañana, poco antes de que aparezca el sol; la gente se levanta al son del canto de los gallos y al repique de campanas de su antigua iglesia, debo aclarar, que mucha de esta gente ha venido desde muy lejos a festejar por cuatro días consecutivos la convivencia familiar y el sentido de identidad a este pueblo milenario perdido entre los matorrales y albores del tiempo, anales de historia cruzan sus veredas y enclavado al pie de una cordillera de cerros majestuosos, ahí esta Chametla; cuya vegetación trópico-serrana le da un encanto único por la belleza del paisaje salvaje.
Prosiguiendo con el recorrido de la gente con la Banda, después de haber bailado y cantado por más de dos horas, se realizan Comelitones donde todas las personas asistentes, tanto propias, como extrañas se reúnen para saborear platillos autóctonos de la región.
Y para demostrar lo anterior, el sábado 21 de enero del 2017, en la Casa Ejidal de Chametla se llevó a cabo la presentación del Libro “Chametla y yo”, Personajes y Cuentos” de Fernando Barraza.
Presentación del Libro
Autor del Libro
Chamela y yo
Al recinto de la Casa Ejidal fueron llegando poco a poco los asistentes a la presentación, hasta que se llenó por completo, esto demuestra el interés que tienen los Chiametlecos cuando alguien habla o escribe sobre sus raíces y antepasados, pero veamos lo que nos comentó para Mazatlaninteractivo.com Luis Fernando García Barraza sobre su obra -Chametla y Yo, personajes y cuentos-: “Para empezar debo decir que me encanta escribir y hablar de mi gente, su historia y sus costumbres y aunque no soy de nacimiento chiametleco, me considero de aquí, porque nací muy cerca de Chametla en el pueblo de Apoderado, aquí realicé mis estudios de Primaria y Secundaria, más tarde incursione en arte dramático, arquitectura, estuve también en Televisa y finalmente me gradué en Ciencias de la Comunicación, pero la persona que me incursiono en la aventura de las Letras fue mi madre, que me enseñó a leer y me proporcionó las primeras lecturas, mismas que marcaron mi vida, por esa razón este libro va dedicado a ella, expresó emocionado hasta las lágrimas el autor.
Continuó: “Este libro es una especie de cuentos y relatos que hablan sobre personajes de Chametla, tomo datos de la historia y los mezclo con leyendas y de manera muy personal escribo imaginariamente como debieron ser los acontecimientos y personajes del Señorío de Chiametlan, pero en su mayor parte hablo sobre la fundación de este pueblo milenario”. En resumen. Acotó. “Chametla Y yo, es un cuento donde se unen todos los pueblos indígenas y el Centro Cultural es Chiametlan, y espero se de su agrado” concluyó.
Del Editor y comentarista
Creativos7
Este libro fue presentado y editado por el Maestro, Nicolás Vidales Soto, miembro de La Crónica de Sinaloa mismo que hizo los siguientes comentarios.
“Fernando aunque ha publicado en argentina y en otras partes, es la primera vez que publica en México, en lo personal, lo incluyo en los nuevos valores de las Letras Sinaloenses, porque podemos escribir mucho, pero si no publicamos las letras, se quedan ahí. Este libro forma parte de la vida del autor, en donde imagina todos los personajes que existieron en la época de los indígenas”.
A mí en lo particular me llamó mucha la intención la forma en que Fernando relata la historia, pues le dio un toque imaginario, anecdótico, ameno y fluido, Este cuento es la historia de cómo vivían los ancestros Totorames, pero todo tiene cimientos reales, es un cuento real, con tintes de Realismo Mágico.
Finalmente dijo. “Es un buen libro y debido a lo extenso de la obra original, como editor tuve que cortarlo a la mitad, porque consideré que el material restante da para otro volumen.
Así concluyó la presentación de este libro, y después de los aplausos, todos los asistentes en solidaridad con Fernando; adquirieron a un precio módico un ejemplar autografiado por su puño y letra.
Entrevista con Nicolás Vidales Soto próximo Presidente de la Crónica de Sinaloa:
Mazatlán interactivo lo cuestionó sobre los proyectos que tiene en puerta de La Crónica de Sinaloa:
“Es importante comentar que La Crónica de Sinaloa es una agrupación de historiadores sinaloenses independiente, pero que en muchas ocasiones, tanto los gobiernos estatales y municipales nos dan mucho apoyo, por tal motivo y con el fin de fomentar la cultura en Sinaloa sumaremos a todos los actores para bajar recursos para los eventos de nuestra agrupación y aunque no se puede depender de las partidas presupuestales para la divulgación de la historia, si podemos gestionar para que los funcionarios pidan más recursos para la cultura, esperemos que los ayuntamientos nos sigan apoyando y se incluyan en este proyecto de promover y dar a conocer nuestra rica historia, de la cual aún queda mucho por contar y publicar”, subrayó.
Sobre dos personajes de Chametla
Nancy Enríquez Díaz y la Fotografía
“Actualmente tengo 59 años, me dedico a la fotografía y estudio en el Centro de Artes de Tijuana, pues después de que mis hijos ya hicieron su vida me quedó tiempo de sobra y decidí aprovecharlo, en esta ocasión estoy exponiendo un álbum fotográfico de fotos de Chametla y me agrada la aceptación que ha tenido” reveló.
Luego Mazatlán interactivo le cuestiono sobre su percepción del pueblo en general. A lo que respondió: “La verdad yo no veo mucho progreso en este pueblo, pues aunque Chametla cuenta ya con casi todos los servicios públicos, son los mismos problemas de siempre, falta de trabajo y creo inseguridad, no hay policía y el ayuntamiento de Rosario no hace mucho por este pueblo, tengo años viniendo y sigo percibiéndolo igual” apuntó.
Nancy Enríquez, es sobrina de Antonio Enríquez “Toñito” un magnifico pintor y poeta del pueblo, que vivió y murió en la total pobreza y abandono y, de no ser por la gente generosa, amigos y familiares la hubiera pasado mucho peor, Toñito nunca se casó y cuidó a su madre hasta que falleció, y leugo de unos años más también él falleció, pero dejó su arte pictórico en las paredes de las casas de muchas familias de Chametla. Aún recuerdo cuando mis primos y yo llegábamos a su casa y nos recibía como si fuera un palacio, pues era muy atento y brindaba lo poco que tenía. En nuestra juventud, cuando existían los bailes de diciembre, llegamos mi primo Rafael “El Guilo” y yo a visitarlo para que nos diera todos los pormenores de las chicas disponibles en el pueblo, en verdad era una bella época en donde Chametla era nuestro paraíso.
Pero volviendo a lo de la fotografía de Nancy Enríquez, nos comentó que es muy probable que el amor por el arte fotográfico lo traiga de su tío.
Pedro Mogón y sus 108 años de edad
a la edad de 108 años
Pedro Ornelas Valdez, alias “Pedro Mogón” es una de las reliquias humanas más valiosas de Chametla, pues a sus 108 años, y aunque un poco sordo, aún habla con claridad y recuerda muchas de sus vivencias, mismo que con pierna cruzada y boca desdentada, se pone siempre en una banca de la esquina poniente de la plazuela y empieza a hablar con la primer persona que se siente a su lado, en esta ocasión Mazatlán interactivo lo entrevistó y le tomó un video, pero antes que las cámaras empezaran a filmar dijo rememorando tiempos pasados: “Antes en Chametla todo era muy bonito, había mucha gente que pescaba en las marismas, yo era muy buen pescador y sacaba unos robalos muy grandes, había mucho camarón, mucha lisa y muchos pescados se nos echaban a perder porque no había como conservarlos, mucho de ese pescado lo salábamos y lo guardamos para semana Santa, había mucho Chriro y lo comíamos tostado en las brasas con atole.
Tratando de probar su memoria le pregunté si había conocido a mi abuelo, a lo que me respondió: “Yo conocí a tu abuelo, Juan Ibarra del que me preguntas, era un buen pescador hasta creo que yo fui mozo de él o él mío, o no me acuerdo, ja ja me falla un poco la memoria”. Y continuó. “Yo hace poco andaba a caballo y de vez en cuando me echo unas cervecitas, ja ja, no me hacen daño me voy al Bar del Raúl y el me atiende de maravilla, casi no me cuesta la cerveza me regalan mis conocidos” presumió.
Y luego, volviendo a lo de la pesca, recordó nostálgico con voz pausa y entrecortada: “Pero ya de eso no queda nada en Chametla, ja ja ja“. Sonrío como valiéndole Mother lo que hayan hecho con su pueblo, al fin y al cabo el sigue viviendo y comiendo.
Y con esto último le dijimos adiós a Chametla.
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