>>> “El océano no es un recurso como los otros, sino que es el que hace posible todo lo demás. Su inmensa diversidad biológica forma parte de la belleza del mundo, y debemos unirnos para preservarla”
La “economía azul” del océano es eje central de nuestras vidas: los productos del mar son la principal fuente de proteínas para al menos una de cada cuatro personas en el mundo. Los recursos costeros y marinos y las industrias relacionadas representan más del 5% del PIB mundial. El 90% del comercio mundial se efectúa por vía marítima. Gracias a los avances tecnológicos, las actividades económicas, tanto en zonas costeras como en alta mar, se están diversificando e intensificando cada vez más.
Aun así, nuestros océanos y sus recursos se deterioran y agotan debido a la presión, cada vez mayor, a la que están sometidos, causada principalmente por la contaminación y la sobreexplotación. Para asegurar la calidad de vida que proporcionan los océanos a la humanidad y mantener la integridad de los ecosistemas marinos, tenemos que cambiar nuestra visión, gestión y uso de los recursos marinos y de las zonas costeras.
La UNESCO presenta la Plataforma Océano
y Clima 2015 con motivo del Día Mundial de los Océanos
“Juntos podemos proteger el océano” es el tema de una serie de eventos que se celebrarán el 10 de junio en la Sede de la UNESCO con motivo del Día Mundial de los Océano (8 de junio). La UNESCO presentará en particular la Plataforma Océano y Clima 2015, que reúne a actores de la sociedad civil con un objetivo: poner el océano en el centro de los debates internacionales relativos al clima. La creación de la Plataforma precede a la Conferencia de las Partes en la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP21), que tendrá lugar en París en noviembre de 2015.
El océano es el primer productor de oxígeno en la Tierra y su papel como “pulmón” del planeta es tan importante como el de los bosques. Además, como absorbe casi un cuarto de las emisiones de carbono que la actividad humana vierte en la atmósfera, es también un importante regulador del cambio climático. Sin embargo, el aumento de las emisiones de CO2–que se traduce en la acidificación del océano– la explotación excesiva de los recursos y la contaminación disminuyen la capacidad de los ecosistemas marinos de adaptarse a los cambios climáticos presentes y por venir.
La Plataforma, lanzada conjuntamente por varias instituciones de investigación, ONG y la Comisión Oceanográfica Intergubernamental de la UNESCO (COI) se propone alimentar los debates de la COP21 relativos a la interacción océano-clima y abogará por que en las negociaciones de la cumbre se tenga en cuenta que cambio climático implica cambio oceánico. Hasta ahora, el océano ha ocupado un lugar relativamente marginal en las negociaciones internacionales relativas al clima, que se concentran sobre todo en las emisiones terrestres de CO2 causadas por el hombre, sobre la captación de CO2 que llevan a cabo los bosques y sobre las medidas necesarias para adaptarse al cambio climático.
La COP21 se celebrará en París del 30 de noviembre al 11 de diciembre de 2015. Su objetivo es lograr un nuevo acuerdo internacional sobre el clima para que el calentamiento del planeta no supere los 2ºC.
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