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>>> Recuérdelo bien, del 12 al 17 de febrero se celebrará el Carnaval Internacional de Mazatlán 2015
La colocación de estás gigantescas esculturas inició este día, con lo que poco a poco se fueron colocando algunas de ellas a lo largo del paseo costero y la Plazuela Machado, la misión de los Monigotes es dar la bienvenida a las fiestas del Carnaval 2015, cuyo lema es: “Los sueños de Momo” y se llevarán a cabo del 12 al 17 de Febrero.
Las figuras de nuevo son obra del pintor, escultor y escenógrafo regiomontano Jorge González Neri, las que quedarán instaladas en su totalidad esta semana y su colosal presencia será el preludio del color, el brillo y el jolgorio que invadirá la ciudad durante la celebración de su máxima fiesta.
La titánica labor de instalar los Monigotes Carnavaleros inició alrededor de las 10:00 horas por un grupo de trabajadores los que apoyados con una grúa y muchas ganas se lanzaron al malecón hasta llegar a la altura del COBAES 37, luego de sesudos cálculos matemáticos y de discutir unas 10 mil estrategias, finalmente se organizaron y alzaron paulatinamente un titán de engrudo y manta pintado para enaltecer el puerto durante las festividades carnestolendas.
Después de levantarlo, los trabajadores del Instituto de Cultura de Mazatlán -organizador del Carnaval- perforaron pequeños hoyos en la arena donde clavaron las estacas que sostendrán el equilibrio del coloso.
Y ese fue el inicio de una larga jornada que comprenderá once esculturas gigantes que se instalarán en puntos estratégicos de la ciudad para maravillar a propios y extraños en las fiestas carnavaleras. Dos más, darán la bienvenida al público carnavalero en la Zona Dorada.
El proceso creativo para elaborar estos gigantes de tela, acero y engrudo, inicia con varias semanas de anticipación a la gran fiesta. Primero se echa a volar la imaginación sobre la temática y se termina de dar forma a las ideas en una gran bodega a un par de cuadras del malecón.
Al entrar a esta fábrica de sueños, se puede observarse el esfuerzo colectivo. Un par de figuras boca abajo con unas bases sosteniendo sus pechos reciben a los visitantes; detrás, una escultura casi cubierta totalmente por una gigantesca bolsa negra mira al cielo, parece ser un arlequín, él está listo, duerme para despertar el asombro de propios y extraños durante febrero.
Por otro lado, una rana gigante, con una cara de niño entre sus piernas es pintada por Ismael y Enrique, éste último, sin miedo realiza sus labores a tres metros de altura sobre una tabla que cruza una estructura metálica.
Más atrás, en “el quirófano”, está Mario, Berenice, Cinthya y Wendy amoldando con cartón y engrudo las piernas de otro monigote. A pocos metros Valentín marca y corta con mucha precisión pedazos de hielo seco para dar forma a una mariposa de acero.
Uno de los encargados reúne a más de una docena de hombres y los anima a mover un monigote a medio terminar.
-Mañana, le responde alguien.
-¡Que mañana ni que nada!, se escucha de otro, “¡Vamos a traer la mona y la vamos a parar!”, ordena el primero y con la organización de un pequeño ejército ponen manos a la obra.
En fin, las anteriores son cosas, historias, del Carnaval de Mazatlán, las que se van armando y quedando como anécdotas que con el paso de los años se recuerdan de manera festiva y ruidosa.
Pero para que le platicamos más, prepare las hilachas y una lana para que se venga al carnaval de Mazatlán. Le sugerimos que reserve con tiempo:
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